LA VISIÓN BUDISTA SOBRE LA VIDA Y LA MUERTE

 

 

El eterno proceso cíclico del vivir y morir es una verdad central del budismo.

Dr. Carlos Cid Priego (Historia de las religiones, pp.131-148)

 

Cuando hablamos sobre la muerte, es interesante analizar puntos de  vista diferentes. El budismo, del que intentamos compartir su visión de la vida y la muerte, es importante, porque se trata de un pensamiento que dio origen a un movimiento religioso con diferente enfoque, según los lugares y naciones en las que se ha expandido.

 

Un breve repaso por la visión budista

Es necesario, para empezar, aceptar una realidad: pretender entender el budismo y a su fundador resulta bastante complicado. El budismo actual, según los expertos, es un entramado laberíntico de filosofía y superstición, de profundas reflexiones espirituales y de poco creíbles relatos mitológicos, de pureza y milagrería, de visiones múltiples, aunque unidas todas por el reconocimiento de un mismo fundador: Budda o Buda.

Los que saben dicen que no existe un relato históricamente coherente de la vida del Buda. Sobre todo resulta muy complicado y difícil trazar una cronología del período quizá más importante de su vida: el que va de su “iluminación” a su “muerte”.

Sin embargo, sobre las siguientes fechas de la vida de Buda, la mayoría de autores coinciden: supuestamente nació en Nepal el año 563 a.C., bajo el nombre de Siddharta Gautama. Fue educado por su padre con un cuidado extremo, evitándole la experiencia y el contacto con todo tipo de dolor y sufrimiento.

Se dice que Siddharta era muy despierto e inteligente y a los 21 años de edad descubrió la vejez como degeneración de la juventud, la enfermedad como degradación de la vida, la pobreza como indiferencia egoísta del hombre por el hombre y la vida que se trueca en la odiosa muerte. Esto le indicó que la vida está plagada de sufrimientos y se preguntó: “¿Por qué la vida del hombre gira en un círculo de ilusorios deleites y reales sufrimientos?” “¿No habrá remedio humano para todo esto?”.

Su reflexión lo llevó a salirse del palacio que era su casa, abandonando padre, madre, esposa y un hijo. A este hecho los budistas le llaman la gran renunciación. A partir de entonces caminó por el mundo como un místico errante, hizo penitencia, pidió limosna, hasta que un día, estando sentado bajo una higuera, le llegó la iluminación. Reconoció los extraviados caminos de la transmigración indú, las causas del dolor y el sufrimiento en el mundo y la vía para eliminar el sufrimiento y llegar a la verdadera e inmutable felicidad y paz.

El resto de la vida de Buda está llena de leyendas hasta su muerte, ocurrida más o menos en el 483 a. C.

Todo lo expuesto hasta aquí es necesario para intentar comprender el pensamiento budista referente a la vida y la muerte.

 

El pensamiento budista sobre la vida y la muerte

Para hacer una aproximación al pensamiento budista acerca de la vida y la muerte, tocamos cinco elementos que consideramos centrales y comunes a diversos budismos.

  1. La vida humana que descubrió Buda: Después de años de aislamiento y sobreprotección, Siddharta Gautama descubre que la vida humana es inestable y transitoria. Esto lo experimentamos a través de cuatro sufrimientos que son: el sufrimiento del nacer, el sufrimiento de la enfermedad, el sufrimiento de la vejez y el sufrimiento de la muerte. Ninguna vida humana se puede considerar exenta de estos pesares. Más aun, la muerte se trueca en desconocidas vidas, con la misma condición sufriente (Karma) que las anteriores, y atadas al ciclo que gira eternamente en círculos de ilusorios deleites y reales sufrimientos.
  2. El ciclo de vida y muerte: En la tradición budista se vive y se muere a la vez, es una sola experiencia. Se afirma que el balance de energía negativa (Karma) acumulada en vida y el apego ignorante a la propia existencia causan que la conciencia fluya interminablemente en un ciclo de nacimientos y renacimientos (evita la palabra reencarnación) denominado Para Buda, el principio de la no permanencia, forma parte fundamental de su pensamiento. Rechaza, por tanto, la noción de un yo o alma individual que, como en las religiones, aguarde la esperanza de vivir eternamente. El vivir y morir son el anverso y el reverso de la existencia humana. El ciclo de nacimientos y renacimientos constituye el proceso natural.
  3. El objetivo del budismo respecto al proceso natural: La pretensión no debe ser el seguir renaciendo eternamente, sino, por el contrario, la pretensión debe ser liberarse de ese ciclo, interrumpirlo, detenerlo y cortarlo. Buda experimentó en sí el medio eficaz para hacer realidad esta pretensión: la meditación. Pasó siete días y siete noches meditando sobre las dos verdades anteriores, y en ella encontró que se le contrarresta con el noble camino de los ocho senderos (recta creencia, decisión, palabra, acción, vida, afán, pensamiento) y, sobre todo y para todo esto, la meditación.
  4. La meditación como herramienta de salvación: Para el budismo, la meditación no es una oración mental a una divinidad (las deidades, si existen, son inmutables), y la salvación no implica la vida eterna del individuo, sino la liberación del Karma y la detención de los ciclos. La meditación, como herramienta fundamental, es un estado de auto concentración que ayuda a interiorizar el cuerpo y la mente en el cultivo de la Sabiduría que permitirá la eliminación del karma y conducirá a la eventual liberación total del ciclo de nacimientos y renacimientos o La práctica constante de la meditación va llevando a la experiencia de la iluminación. Y después, con la recta creencia, la decisión y la constancia, al Nirvana. Los recogimientos budistas no son para la oración sino para la purificación.
  5. El Nirvana como meta final y eterna: El Nirvana de Buda no es un lugar al que se pueda llegar, es un estado (extraño y difícil de explicar) de iluminación interior que, empezando en esta vida mundana, se manifiesta en una serie de cesaciones (cesación del ansia de renacer, de los deseos, los odios, el engaño). Y también en la supresión de toda atadura, en la liberación absoluta y en la bienaventuranza posible para un ser vivo en este mundo.  Esta fue la primera iluminación que alcanzó Buda y otros de sus seguidores. Pero el Nirvana definitivo suprime todas las posibilidades de un nuevo renacimiento. Es la perfección tranquila, pura e interminable, donde se extinguen todas las manchas y se disuelve todo tipo de existencias. Una vez desaparecido en el Nirvana, el “nuevo buda” permanece insensible e impasible en cuanto a todo lo que sucede en el mundo de los renacimientos y de las apariencias. No hay manera de contacto o influencia ni de este mundo al Nirvana, ni del Nirvana a este mundo. (Cf. Carlos Díaz, Manual de Historia de las Religiones, pp. 40-42).

Buda, en realidad, no fundó una religión ni asumió uno o varios dioses a seguir. El budismo no es una doctrina o una teoría sino una práctica, una norma de conducta, una forma de vivir. Algunos autores la asumen como una “terapéutica del Espíritu”. Lo que es innegable es que el budismo es actualmente la más extendida de las “religiones orientales” y la cuarta con el mayor número de seguidores en el mundo.

 

Las tres recomendaciones de la escuela budista “Sutra del Loto”

Sutra del Loto es una escuela budista que pugna por difundir la verdad del budismo de modo fácil y comprensible, que sirva para la vida diaria del hombre y lo ayude a superar sus sufrimientos y pérdidas. En ese sentido, las recomendaciones para asumir la vida y la muerte son las siguientes:

  1. “Lo primero es una doble aceptación: aceptemos la vida como un regalo y, al mismo tiempo, aceptemos que ese regalo algún día va a terminar para ti, para mí, para todos nuestros seres queridos y para todo ser viviente”.
  2. “Lo segundo es convencernos de la enorme importancia de vivir, procurando no dejar pendientes de vida por hacer: vivir plenamente cada momento, decir siempre lo que necesitas decir y hacer siempre lo que necesitas hacer”.
  3. “Lo tercero es que los asuntos de la vida debemos resolverlos en la vida, como pedir perdón, como decir te amo, como decir adiós”.

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