Conoce las 5 razones fundamentales para educar en la fe a los niños de 4 a 6 años


Si estás siguiendo nuestras publicaciones sobre el tema de catequesis escolar, seguramente ya tienes una mejor idea de cuáles son los rasgos humanos y psicológicos de los niños y niñas que tienen entre 3 y 6 años de edad. También sabes que, aunque pequeños, y en una fase de descubrimiento y entendimiento del mundo, tienen la capacidad de conocer a Dios y toda su creación.

Por lo anterior, seguro también compartes nuestra preocupación y piensas que es importante educarlos en la fe para que tengan una experiencia de Dios. Y es que una persona a los 6 años ya debe estar afirmado en lo esencial en cuanto a su desarrollo físico y emocional; en caso contrario, el perjuicio podría ser irreparable.

Como parte del proceso educativo de los pequeños, la catequesis integra una serie de valores, vivencias y conocimientos que está necesariamente ligada a su situación y condición de vida. Fruto de la intervención de distintos educadores como padres, amigos, maestros, entre sí complementarios, la educación en la fe complementa y favorece diversas capacidades, y habilidades humanas que se integran.

Aquí te decimos cuáles son las 5 razones para educar en la fe a nuestros niños pequeños.

 

1.- Amor: Es una manera de expresarles nuestro cariño y darles lo mejor, ya que la fe les puede dar mayor valor a sus almas.

2.- Autonomía: Reforzamos la autonomía de su espíritu y les ayudamos a que crezcan felices.

3.- Socialización: A partir de los 3 años se da un contacto con el mundo, “primera socialización”, y este es un periodo decisivo para el encuentro con Dios.

4.- Imitación: Se forman ideas y sentimientos según lo que ven y perciben en los adultos, especialmente en sus padres. Su ejemplo como cristianos es primordial.

5.- Permeabilidad: A esta edad, su increíble capacidad para conocer y percibir las cosas del medio que los rodea, les facilita descubrir la presencia de Dios para empezar a entender su mensaje.

¿Ya viste que sí es importante? Además, contribuye a su desarrollo emocional y afectivo.

 

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