Las posadas son una excelente oportunidad para enseñar a los niños a expresar y vivir su fe, en la parroquia o en casa con toda la familia
Como cristianos, la Navidad es una de las mayores expresiones de nuestra creencia religiosa. Implica a todos los miembros de la familia y se celebra en una época, generalmente, de descanso de las labores profesionales y académicas. Tiene un espíritu formativo y celebrativo que permite participar a todos los miembros de la comunidad.
La Navidad en el proceso catequístico
Esta fiesta se trata de armonía, paz y generosidad, por eso es muy importante involucrar a los niños y niñas en los festejos; para que experimenten y con ello expresen su fe y acrecienten su amor a Cristo, el amigo que quiere estar en medio de nosotros. Una forma de lograrlo en el colegio, en la parroquia o en casa es hacer una especie de novenario a través cantos, lecturas bíblicas y un dibujo en el que ellos pueden colorear el personaje principal en el cuadro del nacimiento.
Si eres catequista, maestro o un padre de familia, te proponemos una serie de actividades que durante las posadas pueden ser una buena manera de prepararse para el encuentro con Jesús. Te proponemos 4 pasos para exponenciar la vivencia de la fe en estas fechas:
- Iniciamos con un canto.
- Hacemos juntos una oración.
- Escuchamos el evangelio propio del día y reflexionamos.
- Coloreamos una imagen alusiva a ese día.
Día 1. Preparemos la CASA para el Niño Jesús
Canto: Vamos a preparar el camino del Señor
Oración: Señor, queremos prepararnos para recibirte en cada uno de nosotros. Queremos limpiar nuestra conciencia de todo pecado. Perdónanos. Queremos abrirte la casa de nuestro corazón y de nuestra vida, para que contigo vivamos con alegría nuestra condición de hijos del Padre y hermanos tuyos, que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
Evangelio: Lucas 2,1-7.
Día 2. La ESTRELLA ilumina las tinieblas
Canto: Vamos a preparar el camino del Señor.
Oración: Señor Jesús, tú eres la luz del mundo, tú iluminas nuestros pasos y toda nuestra vida. Queremos dejarnos orientar por el resplandor de tu luz. Haz que nuestros ojos se abran para que no tropecemos ni caigamos en la tentación, y nos dejemos iluminar siempre por ti, luz que iluminas nuestro camino y da sentido a nuestra vida. Te lo pedimos a ti, Jesús, nuestro Mesías y Salvador, que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Lectura del evangelio: Mateo 2,1-2; 9-12.
Día 3. Los ANIMALES protegen al Niño Jesús
En este día queremos contemplar a Jesús que nace en un establo rodeado por animales que prestan un servicio a los hombres: la mula y el buey.
Canto: Ven, ven, Señor, no tardes.
Oración: Oh Jesús, que naces entre nosotros en un ambiente pobre y sencillo, rodeado de animales domésticos, haz que preparemos nuestros corazones con humildad y bondad para recibirte en la fiesta de tu nacimiento con un corazón agradecido y abierto a tus dones. Te pedimos también que hagamos posible por convivir y respetar la dignidad de las personas y estimar a los animales que sirven al ser humano. Te lo pedimos a ti, Jesucristo, que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Lectura del evangelio: Juan 110,11-16.
Día 4. Los PASTORES adoran al Niño Dios
Contemplemos a los pastores que cuidaban sus rebaños en las cercanías de Belén cuando Jesús nació. Ellos nos enseñan una lección muy clara: que Dios ama a los sencillos y viene a llenarlos de alegría.
Canto: Vamos a preparar el camino del Señor.
Oración: Señor Jesús, queremos prepararnos para que tú vengas a cada uno de nosotros. Te pedimos perdón por nuestros pecados y te pedimos, una vez más, que aumentes nuestra fe y la confianza en ti, al igual que la esperanza que hemos puesto en ti, y el amor que es nuestra mejor respuesta a tu entrega para darnos la salvación. Te lo pedimos a ti, Jesús, que naciste en Belén y que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Lectura del evangelio: Lucas 2,8-18.
Día 5. Los ÁNGELES anuncian la paz
Como aquella noche en Belén, hoy y siempre los ángeles nos traen buenas noticias a cada uno de nosotros. La gran noticia de hoy es que Jesús viene a nuestra vida, personal y comunitaria, para ser nuestro amigo, hermano y Salvador.
Canto: Ven, ven, Señor, no tardes.
Oración: Señor Jesús, tú que quisiste nacer en Belén para traernos la paz y la felicidad que anunciaron los ángeles en tu nacimiento, te pedimos que la paz reine en cada uno de nosotros, en nuestra familia y en nuestra comunidad. Así llegaremos a tener un poco más de felicidad y dicha, como lo anunciaste en las bienaventuranzas: “Dichosos los que trabajan por la paz”.
Lectura del evangelio: Lucas 2,8-14.
Día 6. Los SABIOS de Oriente
Los sabios o reyes magos vienen de lejos a reconocer a Jesús como Dios. Y, después de recorrer mucha distancia, llegaron a Belén, adoraron al Mesías y le ofrecieron sus regalos.
Canto: Ven, ven, Señor, no tardes.
Oración: Jesús, tú llamaste a los sabios de Oriente para que te reconocieran como Mesías y Salvador de todos. Haz que como los sabios siempre sigamos la estrella de la fe y nos encontremos contigo para conocerte y amarte cada vez más.
Lectura del evangelio: Mateo 2,1-12.
Día 7. SAN JOSÉ cuida siempre al niño Jesús
San José nos da una enseñanza necesaria e importante. Él fue siempre fiel a su esposa, la Virgen María, pero sobre todo al llamado de Dios para que cuidara del Hijo de Dios en su nacimiento y a lo largo de su crecimiento como ser humano.
Canto: Ven, ven, Señor, no tardes.
Oración: ¡Oh, Jesús, Salvador de la humanidad, nacido en Belén y necesitado de la ayuda de José y de María! Haz que, igual que san José, nosotros seamos fieles a la vocación a la que nos has llamado: cuidar nuestra a familia y a quienes necesitan ayuda.
Lectura del evangelio: Mateo 1,18-21.
Día 8. La VIRGEN MARÍA, Madre de Jesús
Contemplemos a María. Ella fue la mujer que siempre dijo SÍ al Señor a lo largo de su vida. María nos da el ejemplo y testimonio más bello y entrañable de cómo hay que abrirse a la voluntad de Dios. Por eso, también es madre de la Iglesia y de todos los cristianos.
Canto: Vamos a preparar el camino del Señor.
Oración: ¡Oh Jesús, tú quisiste hacerte hombre y nacer de la Virgen María para ser nuestro Salvador y estar más cerca de nosotros! Te pedimos que, por intercesión de tu madre, nos permitas imitar su actitud de servicio constante al plan de Dios, y ser fieles a la vocación que en el bautismo recibimos.
Lectura del evangelio: Lucas 1,26-38.
Día 9. JESÚS, el Salvador, nace en un pesebre
Hoy centramos nuestra atención y oración en torno a este niño, desvalido y necesitado, que se hace humano para estar más cerca de nosotros y ofrecernos su salvación. Lo contemplamos, lo adoramos y le prometemos vivir como amigos y discípulos suyos, agradecidos por el don gratuito de su gracia y de su redención.
Canto: Ven, ven, Señor, no tardes.
Oración: Jesús, Mesías y Salvador, te agradecemos todo lo que haces por nosotros. Sabemos que por amor a los humanos quisiste nacer en un establo en Belén. Sabemos y creemos que nos acompañas en todos los momentos de nuestra existencia. Queremos ser tus amigos, que te escuchan y que colaboran para que tu salvación llegue a todos. Que esta Navidad sea para todos nosotros una fiesta de alegría, de agradecimiento y de respuesta a la salvación que tú tan generosamente nos ofreces.
Lectura del evangelio: Lucas 2,1-7.
En esta fiesta de la Navidad, Jesús nace en cada uno de nosotros, para que podamos ser semejantes a él. Aprovechemos esta época para expresar al Señor nuestra intención de estar con él en esta Navidad y siempre, porque estamos convencidos de que él es el mejor amigo, que nos va a dar la felicidad que no conoce límites.