Conoce los cuatro elementos que guían la formación sistémica de laicos para convertirse en catequistas conscientes y comprometidos.
¿Ya leíste el artículo El catequista ideal: construye el mejor perfil de ti mismo para predicar la Palabra de Dios? Seguro lo encontrarás muy interesante porque habla sobre las cualidades humanas y de fe que debe tener cualquiera que se haga llamar un buen catequista. Y que ese artículo complementa lo que ahora queremos contarte sobre la formación que deben tener los catequistas para que puedan contribuir con la educación cristiana de niños, jóvenes y adultos.
En las comunidades hay muchos catequistas con buenas cualidades humanas y de fe pero no todos están bien formados para ofrecer una catequesis comunitaria, incluyente y transformadora. Estos catequistas, generalmente laicos, no tienen que estar dotados únicamente de buena voluntad y vocación; hay que brindarles una formación que se rija bajo 4 ejes de conocimiento fundamental que les permitan conducir sus encuentros catequéticos de la mejor manera.
Los 4 ejes de formación
Madurez humana, cristiana y apostólica
Este eje se centra en la en el desarrollo y orientación del catequista en los valores más esenciales del cristiano como el respeto y el amor por sí mismo y sus iguales. Apela el lado humano y afectivo que sientan las bases de un diálogo comunitario de espíritu constructivo y trabajo de equipo.
Este sentido apostólico se basa en la convicción, la experiencia y el testimonio para desarrollar su sentido evangelizador.
La formación bíblico-teológica
El catequista debe ser un maestro que enseña la fe, y para eso es imprescindible tener una formación bíblico-teológica bien sustentada que le proporcione un conocimiento orgánico del mensaje cristiano.
El origen del sustento teológico parte de las tres grandes etapas de la Historia de la salvación: Antiguo Testamento, vida de Jesucristo e historia de la Iglesia; por eso es necesario conocer las sagradas escrituras y los documentos específicos de la doctrina cristiana.
El catequista debe conocer los grandes núcleos del mensaje cristiano: El símbolo, la liturgia, la moral y la oración.
Este pilar de formación debe dotar al catequista con los fundamentos sólidos de la cristología, eclesiología, espiritualidad, catequética y religiosidad popular.
Las ciencias humanas
Es necesario que el catequista adquiera conocimientos del hombre y de la realidad en la que vive por medio de las ciencias humanas.
La psicología le aporta la guía para conocer al hombre, la estructura de la personalidad, las necesidades y aspiraciones, y el conocimiento de las etapas del ciclo vital humano y las experiencias que abren al hombre al misterio de lo sagrado.
Las ciencias sociales proporcionan el conocimiento del contexto socio-cultural; por eso es necesario que en la formación de los catequistas se haga un análisis de las condiciones sociológicas, culturales y económicas, en tanto que estos datos de la vida colectiva pueden tener una gran influencia en el proceso de la evangelización.
Las ciencias de la comunicación son el broche que ayudará a garantizar la correcta transmisión del mensaje evangelizador.
Pedagogía
Junto a las dimensiones que conciernen al ser y al saber, la formación de los catequistas, ha de cultivar también la del saber hacer.
El catequista es un educador que facilita la maduración de la fe que el catecúmeno o el catequizando realiza y para eso es necesario dominar una serie de herramientas pedagógicas que garanticen ese proceso. Conocer las herramientas y recursos pedagógicos para comunicar mejor el mensaje del evangelio de acuerdo a la edad y el desarrollo de los niños. Porque es indispensable conocer los recursos le ayuden a llevar de la mano, de manera creativa y mistagógica, a sus catequizandos.
La formación de catequistas es una inversión. ¿A qué parroquia no le gustaría tener catequistas más conscientes y comprometidos? ¿A qué parroquia no le gustaría tener catequistas con una sólida formación humana, teológica, bíblica, espiritual, litúrgica? Y es que esta inversión es en favor de la comunidad cristiana, porque no basta con que haya unos libros de catecismos para niños, también hay que invertir en la formación de los catequistas; y estos deben tener una educación integral para dar la mejor respuesta que cada comunidad merece.
Hola ¿Me dan informes por favor, para saber si este artículo está promocionando algún curso de preparación que tenga que ver con estos cuatro ejes? De ser así ¿qué duración tiene? ¿En qué días y en qué horario lo imparten? O ¿se trata de algún libro? Y ¿Qué precio tienen, ya sea el curso o el libro o ambos?
Melisa, gracias por tu interés. Nosotros tenemos cursos para pequeños, niños, adolescentes y adultos bajo estos pilares. Todos ellos son libros organizados en varios grados y te invitamos a conocerlos en nuestro sitio web, bajo la etiqueta de catequesis.
Si tienes alguna otra pregunta, puedes comunicarte con nosotros por teléfono y un asesor especialista te atenderá.