Vive Cristo, esperanza nuestra

"Vive Cristo, esperanza nuestra, y él es la más hermosa juventud de este mundo. Todo lo que él toca se vuelve joven, se hace nuevo, se llena de vida. Entonces, las primeras palabras que quiero dirigir a cada uno de los jóvenes cristianos son: ¡Él vive y te quiere vivo!" "Él está en ti, él está contigo y nunca se va. Por más que te alejes, allí está el Resucitado, llamándote y esperándote para volver a empezar. Cuando te sientas avejentado por la tristeza, los rencores, los miedos, las dudas o los fracasos, él estará para devolverte la fuerza y la esperanza". Con estas palabras comienza el papa Francisco esta Exhortación Apostólica, que a modo de carta dirige con cariño a todos los jóvenes cristianos. Una carta que recuerda algunas convicciones de nuestra fe y que al mismo tiempo alienta a crecer en la santidad y en el compromiso con la propia vocación. También quiere dirigirse a todo el Pueblo de Dios, convocado y estimulado por los mismos jóvenes. El papa se inspira y recoge la riqueza de los aportes más significativos del Sínodo de 2018, plasmados en el Documento final, de modo tal que, su palabra estará cargada de miles de voces de jóvenes creyentes y aun de no creyentes de todo el mundo.